A mucha gente le cuesta llevar a cabo las visitas de psicología mediante este formato, pero lo que está comprobado es que la tecnología se está adueñando de nuestras vidas a todos los niveles y por lo tanto su uso va a ser cada vez más recurrente.
La terapia psicológica online nos permite tener la disponibilidad de conectarnos desde cualquier lugar, en cualquier momento y ante cualquier circunstancia como la que estamos viviendo en la actualidad de confinamiento y aislamiento social.
Ya podemos empezar a salir a la a la calle, pero tendremos que continuar estableciendo unas medidas de seguridad muy severas que no permitirán el contacto social cercano. Y Además muchas personas, ya sea por precaución, seguridad o miedo continuaran saliendo lo mínimo posible, decidirán quedarse en casa. Por eso es aconsejable usar las tecnologías no solo para la terapia sino como una herramienta para estar en contacto con la gente. Lo hemos probado casi todos, hemos estado más conectados con las personas que queremos y hemos probado una nueva forma de relacionarse.
Las fórmulas de videoconferencia ya sea con Skype o videollamadas por whassap son fáciles de usar y posibilitan hacer la visita como si fuera una visita presencial.
Es cierto que para hacer una visita por Skype se requiere instalar este programa, pero es muy fácil hacerlo. Y si quieres, para mayor facilidad está la modalidad de la videollamada por whassap, que la gran mayoría de la gente ya lo tiene instalado en su móvil. Por eso nosotros te ofrecemos cualquiera de estas dos posibilidades para realizar las visitas de siempre pero desde tu casa y sin asumir riesgos.
Quizás en un principio hay personas que rechazan esta posibilidad porque creen que les va a costar mucho más abrirse a otra persona a través de una pantalla, pero esto es algo que en la primera o en la segunda visita se reduce, porque en realidad la persona acaba encontrándose tan cómodo hablando con el psicólogo que como si lo hiciera desde la propia consulta.
Además las terapias que nosotros utilizamos son completamente aplicables desde las nuevas tecnologías, no suponen ningún inconveniente para hacerlas a distancia. En definitiva, lo necesario para poder ayudar a la gente es la escucha activa por parte del profesional, la comunicación bidireccional y el poder transmitir las pautas al paciente por el canal que sea, ya sea telefónico, escrito o online o presencial.
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